Solo susurros perversos oyen mis oídos, solo recuerdos vagos producto a la embriagues
provocada por los líquidos que adormecieron mi garganta y por los destellos implícitos
de tus ojos, por la electricidad de tus manos y por el roce continuo de tus labios.
La noche nos cobijaba y la idea del placer por placer nos rodeaba,
la lujuria guiaba nuestros besos y solo la idea de que tendrías que marcharte
perturbaba mi mente...
Así la noche paso rápida y el amanecer dejó que vieras mi cuerpo desnudo y mi pudor al lado,
cuando lo note quise tomarlo y esconderme,
pero tú nuevamente estabas sobre mí... haciéndome recordar lo olvidado.
La hora ya había llegado, el sol ahora nos cobijaba,
sellamos nuestro secreto con un beso, grabe tu rostro en mi mente y te vi alejar...
porque algo en mi me decía que quizá... no te volvería a ver jamás...
2 comentarios:
al leer esto me produce tantas ensaciones encontradas, aportas de tomar desisiciones relacionadas con el tema ...resulta dificil la claridad frente al futuro.
oalabras q llegan...
yo sigo creyendo firmemente en q en esos momentos donde todo y nada pasa como q todo sobra y aunque tratemos de explicar con palabras nunca se podra, nadie, pero es bueno tratar de describir, por lo menos yo, no me atrevo.
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